Zombies, drogas y acción


¿Qué ocurre cuando en un videojuego mezclamos acción, humor, zombies y los extraños trastornos mentales de su protagonista? Pues que, sencillamente, tenemos el más salvaje de los entretenimientos asegurado. Para proveernos de todo este drama virtual llegan los chicos de Japi Cat, estudiantes de Telecomucaciones que, junto con los chicos de Comunicación Audiovisual de la Universidad de Vigo, han creado un mundo llamado DrugZ. Para crearlo, estos alumnos se han inspirado en la famosa novela “Apocalipsis Z”, del escritor pontevedrés Manel Loureiro, sin embargo, a pesar de tener el argumento de este bestseller como base para hacer volar la imaginación, estos chicos han dotado al juego de una identidad propia que hará disfrutar a cualquiera que se atreva a entrar en este universo apocalíptico y delirante.

Tal y como afirman sus propios creadores, DrugZ se define como “un juego de acción visceral y psicodélico que combina humor, peleas, crafteo y rol, donde será imprescindible el manejo de recursos para garantizar tu supervivencia”. Inspirado en los fighters típicos de los años 80 y con tintes algo grises, el videojuego se nos presenta con un protagonista que, tras una larga depresión, sufre de delirios que le llevan a confundir realidad y ficción, por lo que una de las claves del juego será el ser capaz de controlar el estado mental del protagonista para poder superar las diferentes fases. Para esto, deben evitarse ciertos elementos como las drogas, el alcohol y algunas medicinas que afectan a su estado mental.


Durante el desarrollo de la trama nos encontraremos sumidos en un mundo desolado ambientado en una urbanización de Pontevedra en el que deberemos obedecer las órdenes de un gato (elemento clave del juego) y construir armas con las que hacer frente a este peculiar fin del mundo para poder alcanzar el objetivo último de esta truculenta aventura: sobrevivir. Como la vida misma, ¿no?.

Redactora del texto: Claudia Núñez Barral

Comentarios

  1. Pinta moi interesante, sobre todo por ese elemento do estado mental do protagonista.

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